El pleno del Parlamento europeo dio este miércoles luz verde a la reforma de la 'Tarjeta azul' con la que la Unión Europea quiere atraer a migrantes altamente cualificados, gracias a nuevas normas que agilizan y flexibilizan las condiciones para la contratación de personal extracomunitario.
El objetivo es simplificar los procedimientos para contratar a personal de alta calidad en terceros países, por ejemplo armonizando las condiciones de entrada y residencia y flexibilizando criterios.
De este modo, bastará con que el migrante tenga un contrato o una oferta de empleo para un periodo de seis meses para que pueda solicitar la Tarjeta Azul y se rebaja el mínimo salarial al equivalente del salario medio bruto del país en el que trabajará.
El sistema existe desde hace más de una década pero apenas ha sido utilizado, de hecho en 2019 apenas se expidieron 36.806 permisos de trabajo en la UE con este sistema, la mayoría en Alemania y solo 79 en España.
Con las nuevas normas adoptadas por el pleno con 556 votos a favor, 105 en contra y 31 abstenciones, la Eurocámara confía en que la 'Tarjeta Azul' revisada ayude a abrir una vía segura para la entrada de migración legal en la Unión Europea.
El ponente del informe del Parlamento europeo, el socialista Javier Moreno, ha destacado que la reforma es "especialmente importante para nuestras pequeñas y medianas empresas" y ha aclarado que entre los cambios se ha ampliado el ámbito de aplicación al incluir a los beneficiarios de protección internacional.
Además se prevén que los desplazamientos entre países de la UE para los titulares de la tarjeta sean "más sencillos" y la reagrupación familiar más rápida.